lunes, 30 de septiembre de 2013

LAS ELIMINACIONES DEFIENDEN LA VIDA


BLOG NATURAL
Por Daniel Guzmán

“Vivimos intoxicándonos y morimos envenenados”

                        Dr.  Manuel Lezaeta Acharan.

 

Ya no se crea el famoso cuento que le decían en la escuela “los amigos de la Salud” que uno debe acostumbrar el estómago, es decir ir al baño una vez al día… tener esa actitud es contraproducente y dañino… Lo ideal es ir dos o tres veces por jornada (24 horas)…

 Es una lástima ver cómo vivimos la población en general, pues cada día estamos pendientes de las horas de comida, ya sea principales o meriendas y nos despreocupamos de su eliminación intestinal, sabían ustedes que es más importante desocupar el intestino que ingerir alimentos, el ser humano puede vivir muchos días sin comer y no puede estar 24 horas sin evacuar su intestino, pues se envenena. Y aunque no se coma nada, cada día debe evacuarse un litro de bilis. Los cuerpos que no eliminan sus impurezas se envenenan y fatalmente se muere de ello. Según el Dr. Acharán y muchos otros Naturistas, opinan que sólo existen tres causas de muerte: Accidente, Vejez e intoxicación.
La muerte  por vejez, diremos que es la muerte natural, actualmente es una excepción, pues sólo es resultado del agotamiento de la fuerza vital más allá de los cien años (si hacemos un recorrido por internet, encontraremos lugares donde existen personas que viven más de 100 años, eso demuestra estas teorías naturistas). Las muertes que vemos cada día son antinaturales, prematuras, violentas y trágicas, pues implican la interrupción del proceso vital. La muerte que corta la vida  de la criatura antes de nacer, que se lleva a muchos jóvenes llenos de ilusiones y talentos, hombres profesionales en plena potencia y actividad, esta muerte, no es preparada por las leyes que rigen la vida humana, sino que es el resultado de la ignorancia de la víctima y de errores que nos llevan a vivir en constante conflicto con la Naturaleza.
 

Quien no muere por accidente o de vejez sólo puede morir de intoxicación por efecto de putrefacciones intestinales y deficientes eliminaciones de su piel, riñones, intestinos y pulmones; o bien como resultado de intoxicaciones medicamentosas. Aunado a lo anterior debemos agregar nuestro estilo de vida urbano, la alta proliferación de vehículos, nos obliga a respirar un aire viciado, alimentos muy industrializados, etc.
Como vemos la vida citadina nos provoca una cotidiana impurificación orgánica, es indispensable buscar el camino de las eliminaciones mediante diversas actividades:
exposición a baños de sol, agua fría y ejercicios físicos al  aire libre, etc.

Ahora, algo que es básico saber es que cuando el cuerpo se desintoxica muy deprisa  suele sentirse falta de fuerza. Esto erróneamente lo llamamos “debilitamiento”, el cual en realidad aunque suene ilógico es recuperación de la vitalidad orgánica. En efecto, la gran cantidad de tóxicos que obligamos a nuestro cuerpo a que procese durante muchos, pero muchos años, el lo toma como algo normal que no es, por lo que el proceso de restauración involucra  sensaciones que muchos de mis pacientes no quieren experimentar por lo que el 60% se me corren por mas que les explique... recuerden que todo proceso de desintoxicación provoca malestares… tenemos la mala idea que solo el dejar el cigarro, las drogas y el alcohol… provocan dichos síntomas… yo le aclaro en esta entrada… no es cierto… nuestra mala forma de alimentarnos… también genera esos síntomas…

 Sabemos que las funciones eliminadoras, al igual que las de nutrición, dependen del equilibrio térmico. Las eliminaciones serán normales con 37 grados centígrados en la superficie del cuerpo, como en las entrañas. El frío exterior va unido a la calentura interna que limita la irrigación sanguínea de la piel y congestiona los órganos.

La piel elimina por simple exhalación y también por el sudor. Pero no se crea que toda transpiración es igualmente eficaz, porque la que se produce por ejercicio o abrigo fácilmente enfría la piel, mientras que la que se obtiene mediante la acción del sol, del vapor o por irritación (usando plantas urticantes como la Ortiga), por medio de estas acciones atraemos hacia los poros todas las materias malsanas para su expulsión.
 
Ahora dentro  de todo lo que nos intoxica, las sustancias más rebeldes para abandonar el cuerpo son las de los alimentos altamente procesados y los que contienen las bebidas gaseosas, ahí lo ideal  es un “lavado sanguíneo”, el cual consiste en exposiciones al sol y al vapor (en otra entrada hablaremos de los tratamientos más detalladamente).
Para vivir sano es necesario mantener activas las eliminaciones naturales del cuerpo, es preciso desocupar completamente el estómago cada día, al despertar, después del almuerzo y antes de dormir. El proceso digestivo de alimentos cocinados termina en 4 o 6 horas, de manera que los residuos deben ser expulsados cada 8 horas. Una evacuación cada 24 horas es causa de impurificación orgánica por retención de excrementos, de bilis y otros desechos. La bilis que elabora el hígado es producto tan nocivo como la orina y en el adulto alcanza a la cantidad de un litro cada día, el cual debe ser expulsado por el intestino aun cuando se practique ayuno.
En el caso de personas que están enfermas ahí es preciso procurar una eliminación enérgica que le permita expulsar las materias morbosas, siempre presentes en toda dolencia. Al expulsar los venenos del cuerpo se levanta la energía vital del organismo para que la naturaleza se ponga en pie generando sus defensas para salvarlo a uno del desarreglo funcional.
Finalizamos esta entrada con la siguiente reflexión del Dr. Acharan:
“La  muerte natural, que llega como el término apacible de un día de labores, que el hombre fatigado y anhelante de reposo aguarda como un descanso necesario, alrededor de los cien o más años, es desconocida en la actualidad y nada tiene que ver con el término de una vida rebelde en conflicto constante con la naturaleza. Vivimos al margen de la Ley Natural y con ello nos preparamos una muerte violenta, prematura, dolorosa y trágica que, como nube negra, se cierne sobre nuestras cabezas cada día y constantemente amenaza nuestra tranquilidad. Vivimos intoxicándonos y morimos envenenados.”
Y como dicen… colorín colorado… esta entrada se ha terminado… nos vemos la próxima semana... Con las técnicas para recuperar la salud… Saludos.